Si a lo épicos que son los partidos le sumamos además unos diseños muy vistosos de los logos de los equipos, tenemos la combinación perfecta. Por otra parte, bien por la camiseta celeste, un color que se puede diferenciar perfectamente de las rayas blaugranas y que indica que no es una camiseta diseñada exclusivamente para lucir en partidos poco trascendentes. Hasta tal punto, que eventos como la Super Bowl se han convertido en un gran foco de interés en todo el mundo.